La presencia de huecos subterráneos, naturales o artificiales, es frecuente en el subsuelo de ciudades históricas y en algunas zonas geográficas concretas y constituye con frecuencia un riesgo para la estabilidad de las estructuras. El relleno de las cavidades con arcilla expandida Laterlite es una técnica caracterizada por su colocación eficaz y segura.
De hecho la arcilla expandida (a granel o ligada con cemento), gracias a su elevada resistencia a la compresión, permite redistribuir las presiones en el subsuelo, eliminando las peligrosas concentraciones de carga que se atenúan y redistribuyen en el tiempo. Respecto al relleno con árido tradicional, reduce considerablemente las sobrecargas y las presiones laterales evitando los riesgos de asentamiento.
Se utiliza la misma técnica también para la protección de depósitos enterrados en desuso, que pueden llenarse de arcilla expandida y dejarse in situ.
Ventajas
Tensado del relleno
La máxima eficacia de la intervención puede obtenerse inyectando en la cavidad, después del relleno con arcilla, una resina poliuretánica expansiva a fin de saturar completamente el volumen interior y facilitar a la cúpula de la cavidad un valor preestablecido de pre-compresión. Laterlite ha puesto a punto en colaboración con Uretek el sistema denominado «Cavity Filling».