En la ampliación de terraplenes existentes hay que prestar especial atención al asentamiento de la parte de nueva construcción, que podría causar con el paso del tiempo un peligroso desnivel.
El uso de arcilla expandida minimiza los riesgos gracias a la fácil densificación, al menor asiento por compactación respecto a los áridos normales y a la mínima sobrecarga en el terreno de soporte.