La solera que cubre las instalaciones de calefacción, bien sean hidráulicas (por tubería) como eléctricas (por cable), tiene una tarea muy importante en la eficiencia del sistema, ya que debe tener una elevada una conductividad térmica para garantizar la óptima transferencia de calor hacia los espacios superiores a la propia instalación.
En los sistemas hidráulicos en particular, el uso de una solera de elevada conductividad permite reducir la temperatura de circulación del agua, favoreciendo así el uso de sistemas de producción de calor más eficientes (calderas de condensación de gas, geotérmicas, solares, bombas de calor, etc.) y aumentando su rendimiento energético con un consiguiente ahorro económico.
La posibilidad de aplicar la solera radiante en bajo espesor es también importante, porque permite reducir la inercia térmica del sistema, dándole una respuesta más rápida con una mejora del confort y porque permite intervenir en obras donde por razones constructivas el espesor disponible es muy reducido, sobre todo en rehabilitación.
La gama de soleras radiantes PaRis (del italiano Pavimento Riscaldato, “Pavimento calefactado”), desarrolladas específicamente para sistemas de calefacción y refrigeración por el suelo, responde de forma óptima a estas exigencias:
Solera radiante semiseca de elevada conductividad térmica con fibras metálicas: Paris 2.0
La solera reforzada con fibras metálicas PaRis 2.0, con su conductividad térmica elevada (lambda = 2.02 W/mK) ofrece una prestación óptima del sistema sin necesidad de aditivos. Asimismo, permite realizar grandes superficies (hasta 150m²), sin utilizar mallas de refuerzo y/o juntas de retracción. Su fórmula especial permite un tiempo de secado rápido y la puesta en marcha del sistema de calefacción al cabo de tan solo una semana.
Predosificada en saco, su puesta en obra simple y tradicional (consistencia semi-seca) simplificando la intervención incluso en obras de tamaño pequeño o de difícil acceso.
Solera radiante autonivelante de bajo espesor: Paris SLIM
La solera radiante realizada con el mortero autonivelante PaRis SLIM, además tiene la peculiaridad de permitir ir a espesores muy reducidos en función del tipo de panel del sistema:
- 10 mm sobre los tubos o tetones en sistemas tradicionales de paneles con placa aislante.
- 5 mm o 7 mm sobre los tubos o tetones en sistemas esbeltos de nueva generación con placas de bajo espesor (rejillas o tetones huecos)
PaRis Slim tiene una retracción controlada y permite también realizar grandes superficies (hasta 200m²), sin juntas de retracción y/o sin utilizar mallas de refuerzo y permite la puesta en marcha del sistema de calefacción al cabo de tan solo cuatro días.
Predosificada en saco, su puesta en obra similar a la de los morteros autonivelantes tradicionales, después de amasar en cubo con batidora eléctrica, o con máquina de mezclado y bombeo en continuo.
La capa de soporte del sistema de calefacción radiante para integrar las instalaciones eléctricas y sanitaria y preparar la superficie para la puesta en obra de las placas de soporte de los tubos o de los cables calefactores puede ser muy útil para la reducción de pérdidas caloríficas hacia la parte inferior, en particular en caso de primeros forjados o forjados sobre locales no calefactados.
La colocación de Latermix Cem Mini, recrecido predosificado aislante – 10 veces más aislante que una solución tradicional -, como base del sistema, complementa (o en algún caso sustituye) el aislamiento propio del sistema (placas aislantes), permitiendo nivelar el paso de instalaciones previamente a la puesta en obra del sistema radiante. Además de ser aislante, es superligero (solo 600 kg/m3) y reduce sensiblemente las cargas sobre el forjado, característica muy útil sobre todo en rehabilitación.
En caso de sistemas de calefacción en forjados en contacto con el terreno y en primeros forjados en general, además de lo presentado anteriormente es posible realizar recrecidos aislantes con la Arcilla Expandida hidrófoba especial Laterlite Plus, que permiten la óptima reducción de pérdidas caloríficas hacia el suelo además de evitar la ascensión capilar de humedad.
Se utilizan frecuentemente como base de suelos radiantes industriales gracias a la alta resistencia mecánica y estabilidad de la Arcilla Expandida, que permite su uso en forjados de inmuebles con cargas elevadas (naves industriales, fábricas, almacenes y centros comerciales). Para más información, consultar el apartado específico.