La pendiente de una cubierta plana desempeña un papel esencial para garantizar el drenaje y la evacuación del agua de lluvia, y para evitar su estancamiento e infiltración en el edificio. Por lo tanto, es esencial para el buen funcionamiento y la durabilidad de la impermeabilización y el aislamiento en una cubierta plana.
La pendiente de cubierta es un recrecido de espesor variable que se realiza sobre un forjado de cubierta para darle la inclinación necesaria vertiente hacia sumideros, cazoletas o canalones y bajantes de aguas pluviales. La pendiente puede servir como soporte para la impermeabilización, el aislamiento o el pavimento.
Formación de pendiente con mortero aligerado
A menudo, los morteros y hormigones utilizados para la formación de pendientes en cubierta plana constituyen cargas importantes e innecesarias para el edificio, ya que se apoyan en la estructura sin aportar ninguna ventaja técnica, térmica o estructural.
Los hormigones y los morteros ligeros y aislantes predosificados a base de Arcilla Expandida de la gama Latermix (Fast, Facile, Cem Mini, Cem Classic, Cem Maxi) permiten la realización de pendientes o soleras aligeradas sobre cubierta plana, estables y duraderas, reduciendo significativamente las sobrecargas, entre un 50 y un 70% más ligeras que las soluciones a base de áridos convencionales.
En función del espesor mínimo y máximo de la pendiente y de las sobrecargas a considerar, se puede definir el producto o la combinación de productos más adecuados para cada proyecto.
Aligerar la pendiente de cubierta es útil en cualquier obra o proyecto, pero especialmente conveniente o incluso necesario en las intervenciones de rehabilitación.
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